Al desempeñar tu papel como empleado, adquieres justamente el derecho a recibir un finiquito. Sin importar que te hayas dado voluntariamente de baja, te hayan despedido o el contrato haya terminado, puedes cobrarlo. Conoce aquí qué hacer para calcular qué cantidad de dinero te corresponde y cómo recibirla.
El finiquito básicamente consiste en cuentas que tiene pendiente la empresa con trabajadores, y es cobrado al terminar relaciones profesionales. Se expresa a través de un documento, el cual refleja el dinero a cobrar por el trabajador. Esto se produce al ser despedido o al finalizar el contrato laboral.
Allí van incluidas las vacaciones que no disfrutó, pagas extraordinarias, salario del mes en el que ocurrió el despido y, si aplica, la indemnización. Ahora bien, existe una forma de distinguir la indemnización debido al despido del finiquito.
El finiquito es otorgado siempre, sin importar la causa que puso fin a dicha relación laboral o de trabajo. Pero la indemnización aplica solamente si se ha hecho el despedido de forma improcedente o debido a causas objetivas.
En cuanto a lo que se refiere a finiquitos, existen diferentes tipos de estos en el país. Se distinguen unos de otros dependiendo de la razón que lleva a culminar la relación laboral. Es decir, hay finiquitos por despido, baja voluntaria o final del contrato; y cada uno tiene sus propias características particulares.
Con el finiquito debido a despido, la relación de trabajo puede concluir por despido colectivo, disciplinario, objetivo o por una fuerza mayor. Según la justificación de los motivos que llevaron al despido, este pudiera dividirse de 2 maneras: procedente o improcedente.
El despido procedente es cuando está justificado debido a impuntualidad, actitudes malas, negligencia u otros. Mientras que el improcedente es aquel en el que no existe la posibilidad de demostrar el motivo del despido.
El tipo específico de despido resulta importante porque, según este, se verá afectado directamente el importe correspondiente al finiquito. Eso se debe a que el monto para la indemnización varía de un caso a otro.
Mira también información sobre cómo calcular la prestación por desempleo.
No todos los casos en los que se otorga el finiquito tienen que ver con que el trabajador es despedido. Hay situaciones en las que es el mismo trabajador quien decide marcharse o irse de la compañía donde está laborando.
Es decir que por su propia voluntad, sin ningún tipo de presión, este se va de esa empresa. Al ocurrir de esa forma, no se tiene en cuenta ninguna indemnización al hacer los cálculos referentes al finiquito.
Otro de los motivos, que pudieran llevar a que se aplique el finiquito, consiste en la finalización de un contrato temporal. Siendo ese el caso, la indemnización va a otorgarse o a denegarse de acuerdo a ciertas condiciones.
Esta se daría si el contrato no se culminó por baja voluntaria o despido disciplinario. En caso contrario, la indemnización no sería concedida.
Si deseas hacer el cálculo del finiquito aplicable a España, tienes que sumar los conceptos que se especifican a continuación:
Analizar un ejemplo que denote el cálculo de un finiquito te ayudará a comprenderlo mejor, así que aquí está:
Rosa tiene un año laborando para una empresa de muebles. La despidieron debido a reducción de personal, el 15/04/2020. El salario mensual que recibía equivalía a 1.000 euros, junto con 2 pagas adicionales de unos 1.000 euros cada una.
Además, hasta esta fecha ha podido disfrutar de solo 5 días vacacionales, de los 30 que le corresponden por cada año trabajado. Considerando toda esa información, de esta forma se calcula su finiquito:
No existe ningún plazo fijo estipulado por la ley a fin de que las compañías hagan el pago del finiquito. Sin embargo, deben tratar de hacerlo lo antes posible. Pero, cuando el finiquito es debido a despido o final del contrato, las empresas suelen entregarlo junto a la carta del despido.
En lo que se refiere al caso de finiquito debido a baja voluntaria, normalmente se entrega el día final de trabajo. La excepción es cuando no se ha realizado el preaviso, y bajo esas circunstancias se puede tardar más.
De una u otra forma, las empresas tienen que dar el finiquito una vez que finalicen la relación de trabajo. De no proceder de esta manera, las corporaciones estarían quedando mal al pagar el finiquito muy tarde.
Cuando la compañía no paga, lo recomendable es que procedas a reclamar lo que se te debe. Puedes hacerlo a través de llamadas de teléfono grabadas, en persona o correos electrónicos. Si la compañía no te hace caso, tienes de plazo hasta 1 año, a fin de hacer una reclamación.
Ese año empieza a contar desde el día que ya dejaste de laborar. Sin embargo, en caso de reclamación debido a despido, cuentas con 20 días nada más. Antes de reclamar, primeramente tienes que presentar alguna papeleta para conciliación y, si no paga la empresa, haz una demanda judicial.
Aparte, tienes el derecho a pedir tasa de interés del 10%, de acuerdo con el Estatuto para los Trabajadores. Mientras esperas a que se resuelva ese problema, podrías solicitar préstamos personales o préstamos rápidos online. Si necesitas urgentemente el dinero, elige usando un simulador préstamo.
Lo más probable es que cualquier duda que aun tengas sobre el finiquito se resuelva en esta sección.
Incluye la indemnización total de los pagos percibidos mensualmente. Por ejemplo, el sueldo, bonos mensuales, comisiones, semana corrida, vacaciones no tomadas y más.
El finiquito es otorgado cuando acaba la relación entre la empresa y el trabajador. Pero la liquidación solo se da si la responsabilidad del fin del contrato laboral es de la empresa.
El dinero recibido como finiquito puede ser usado libremente para lo que resulte necesario o deseado.